Masa Quebrada
13
AGO
2024
    La masa quebrada o pasta brisa es muy fácil de elaborar, con ella podemos hacer quichés, tartas, tanto dulces como saladas. Ya realizamos una anteriormente otra receta de masa quebrada (con huevo) que contiene huevo en su elaboración.
    Esta receta es la típica pie crust en la elaboración de tartas americanas, como por ejemplo la tarta limón y arándanos Blueberry pie, o la famosa tarta de manzana americana Apple pie.
    En este caso, como es para la elaboración de postres, contiene azúcar, poro podemos quitarla en el caso de utilizar la masa para recetas saladas.
    La masa la podemos preparar con anterioridad y reservar en la nevera o incluso congelarla para cuando la necesitamos. Así en cualquier momento podremos preparar unos postres más rápidamente.
    La cantidad indicada por defecto es para realizar tanto la base como la parte superior de una tarta redonda de 22 cm de diámetro.
60 minutos
Fácil
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Conversiones
Ingredientes
350
g de harina
tamizada
50
g de azúcar
blanca granulada o icing sugar
4
g de sal
250
g de mantequilla
muy fría, cortada en pequeños trozos
90
ml de agua
muy, muy fría
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Resumen elaboración
1
Mezclar en el procesador los ingredientes secos: la harina, el azúcar y la sal, durante unos segundos para que se mezclen.
2
Incorporar a los ingredientes tamizados la mantequilla fría cortada en pequeños cubos. Es importante que la masa no se trabaje demasiado para que no se vuelva elástica. Lo mezclaremos en un robot de cocina a velocidad alta durante intervalos de tiempo, hasta conseguir una mezcla arenosa.
3
Es el momento de añadir el agua muy fria, comenzaremos incorporando una cucharada en forma de gotas distribuidas. Seguiremos añadiendo cucharadas hasta que comprobemos que al coger un puñado de masa, al apretar, se mantiene unida.
4
Pasar la masa a la mesa con un poco de harina, y terminar de trabajarla para que todos los ingredientes se integren bien, y formar una bola uniforme. Es fundamental no amasar demasiado.
5
Hacer una bola con la masa y envolverla en film. Llevar a la nevera por los menos durante 1 hora para que coja consistencia.
6
Sacar la masa y dejar reposar durante 5 minutos. Estirar la masa con un rodillo, con un poco de harina para que no se pegue. Extender hasta un grosor de 6 mm.
7
Colocar en el molde. No es necesario engrasarlo porque al llevar mantequilla se despegara con facilidad una vez horneado. Apretar con las yemas de los dedos para que la masa esté en contacto con el molde y retirar el exceso.
8
Reservar de nuevo en el congelador durante 10 minutos para que la masa vuelva a coger consistencia.
9
Si vamos a hornear sin relleno, pinchar con un tenedor toda la base para evitar que durante el horneado suba y colocar una capa de papel de aluminio en la base y cubrir con peso (arroz, garbanzos...), para que la masa no suba. Hornear inicialmente a 210ºC durante 15 minutos.
10
Sacar del horno, retirar el peso y continuar con el horneado a 180ºC durante 20 minutos más o comprobemos que el centro esté dorado, así conseguiremos que el calor llegue a la base y también se hornee. Podemos curbir el borde de la tarta con una lámina de aluminio doblada por la mitad, asi se protegerá el borde de que se queme.
11
Sacar del horno y dejar reposar en una rejilla hasta que esté completamente frío.
Resumen de pasos
mezclar
mezclar
velocidad baja
añadir
amasar
sólo hasta integrar
enfriar
1 hora
estirar
colocar
congelar
10 minutos
hornear
15 minutos
hornear
20 minutos
enfriar
en una rejilla
Consejos
Todos los ingredientes tienen que estar fríos, para evitar que durante la elaboración la mantequilla se derrita.
Podemos realizar la mezcla a mano usando un tenedor o un amasador de mano, utilizando un robot de cocina con el batidor plano, siempre intentando no calentar la masa para que la mantequilla no de derrita.
Es importante dejar reposar la masa en la nevera antes de ponerla en el molde, de esta forma cogerá consistencia.
Durante el horneado vigilar constantemente ya que se puede quemar muy rápido. El tiempo siempre variará en función de nuestro horno, de la cantidad que estemos realizando y de su forma.
Para evitar que los bordes de quemen, cubriremos el borde de la tarta con una lámina de aluminio doblada por la mitad, así se protegerán.
Si el relleno que vamos a utilizar también necesita cocción, deberemos dorarlo un poco menos, ya que después se terminará cuando lo volvamos al horno.
Aunque no hemos engrasado el molde, saldrá fácilmente del molde una vez frio, ya que la masa incorpora mantequilla y evita que se pegue.
Si no vamos a utilizarlo de inmediato guardar envuelto en papel film.
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