Según la consistencia se puede clasificar en los siguientes tipos:
La siguiente receta es para preparar glasa madre con albúmina, a partir de esta, añadiendo agua conseguimos los otros tipos.
Ingredientes:
Es recomendable utilizar azúcar de textura muy fina: icing lugar, que es más fina que el azúcar glas, y así el resultado final no presentará una textura gránulos.
El cremor tártaro lo podemos sustituir por 1 cucharadita de zumo de limón. Este ingrediente tiene una función de estabilizante, ya que aporta mayor flexibilidad y tolerancia al calor.
A continuación se indican los pasos de elaboración. Utilizaremos un robot batidor a velocidad baja, con el fin de no incorporar un exceso de aire.
Consejos
La glasa real, cuanto menos fluida sea, se seca con más rapidez, por este motivo es importante cubrirla cuando no se utilice con papel film en contacto con la glasa.
Para colorear utilizar colorantes en gel, ya que no altera la textura de la glasa.
La glasa madre se puede guardar en un recipiente hermético, cubierta con papel film, en la nevera una semanas, y también podemos congelarla. Para volver a utilizarla tendremos que batir ligeramente hasta que obtenga la consistencia inicial.